Viajar [...]
es intentar volar;
volar conociendo otras ramas
recorriendo caminos
es intentar cambiar.
Viajar es volverse mundano
es conocer otra gente
es volver a empezar.
Empezar extendiendo la mano,
aprendiendo del fuerte,
[...].
es intentar volar;
volar conociendo otras ramas
recorriendo caminos
es intentar cambiar.
Viajar es volverse mundano
es conocer otra gente
es volver a empezar.
Empezar extendiendo la mano,
aprendiendo del fuerte,
[...].
(Gabriel Celaya. Fragmento)
Las profes de Infantil del colegio Generación del 27 ya están preparadas para el viaje que nos espera durante este curso, y los niños y niñas también, pues para nosotros el proceso de aprendizaje y crecimiento también supone un viaje lleno de aventuras, conquistas y retos.
Durante estas primeras semanas hemos iniciado el camino. Los más pequeños han conocido un nuevo lugar y han disfrutado jugando con sus amigos.
Experimentamos lo divertido y tranquilo que resulta un ratito de lectura en nuestro momento para descansar tras el recreo.
Y ¡estrenamos la pizarra digital!, de la que dispondremos este año en el aula, junto con nuestros compañeros de 4 y 5 años.
Durante este tiempo los más mayorcitos nos hemos reencontrado con nuestros amigos, que algunos no habíamos visto en todo el verano y descubierto que este año somos más en clase, porque estamos juntos 4 y 5 años, aunque echamos de menos a Tadeo que se ha marchado. Lo hemos pasado muy bien con juegos para estrechar vínculos y conocernos mejor los primeros días.
Nos encontramos también con antiguas rutinas del día a día en el aula, pero también vamos descubriendo nuevas, así como nuevos rincones, modificando el espacio y el mobiliario de la clase.
Y poco a poco vamos activando nuestras manos, algunas muy relajadas del verano, recordando los trazados que ya sabíamos y nuestro nombre, para conocer nuevos personajes y sus aventuras, que nos guiarán este año en nuestro aprendizaje.
Nos encontramos también con antiguas rutinas del día a día en el aula, pero también vamos descubriendo nuevas, así como nuevos rincones, modificando el espacio y el mobiliario de la clase.
Y poco a poco vamos activando nuestras manos, algunas muy relajadas del verano, recordando los trazados que ya sabíamos y nuestro nombre, para conocer nuevos personajes y sus aventuras, que nos guiarán este año en nuestro aprendizaje.
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